Mantenimiento de placas solares: Consejos y buenas prácticas

04 Nov Mantenimiento de placas solares: Consejos y buenas prácticas

En Baratze tenemos un fuerte compromiso con el cuidado del medioambiente y apostamos por el futuro energético no solo de los hogares, sino también de las empresas e instituciones, a través de sistemas de placas solares fotovoltaicas. Estas placas están diseñadas para aportar soluciones sostenibles y eficientes, que se adaptan a las necesidades de cada uno de nuestros clientes. Hoy queremos hablarte del mantenimiento de placas solares y qué acciones debes poner en marcha para preservar la vida útil de estos dispositivos.

La importancia del mantenimiento de placas solares

El mantenimiento de placas solares es crucial para garantizar que el sistema funcione al máximo de su capacidad y que la inversión inicial se traduzca, a largo plazo, en un ahorro significativo y duradero en la factura de electricidad. En este sentido, debemos decirte que la instalación de los paneles solares supone una inversión que, a priori, puede parecer costosa; sin embargo, con los años, podrás notar cómo esta inversión se amortiza considerablemente.

A pesar de que las placas solares requieren relativamente de poco mantenimiento, es muy importante seguir algunos pasos básicos de cuidado. Esto puede optimizar el rendimiento de la instalación y prolongar su vida útil. Y también debemos contarte que las placas solares tienen una vida útil muy larga: Entre 25 y 30 años, aproximadamente. ¿Por qué es importante el mantenimiento de placas solares?

El polvo, la suciedad, las hojas, los excrementos de las aves y otros residuos orgánicos e inorgánicos, pueden acumularse en las placas, reduciendo su eficiencia hasta en un 20%. Por lo tanto, dar el mantenimiento adecuado es una forma de garantizar, no solo un mejor rendimiento, sino hacer que las placas tengan una vida útil mucho más larga, maximizando, claramente, el retorno de la inversión. Además, con el mantenimiento adecuado es posible identificar y solucionar problemas menores antes de que estos se conviertan en costosas reparaciones.

¿Cada cuánto tiempo hacer el mantenimiento de placas solares?

Una de las preguntas más habituales de nuestros clientes es cada cuánto tiempo llevar a cabo el mantenimiento de placas solares. En principio, debes saber que, por regla general, es necesario inspeccionar y limpiar las placas solares de una a dos veces al año. Sin embargo, si la instalación se encuentra en una zona con condiciones climáticas adversas o con mucha suciedad en el aire, puede ser necesario aumentar esta frecuencia. Eso sí, las lluvias periódicas, dependiendo del emplazamiento de la instalación, pueden contribuir a limpiar buena parte de los residuos.

De nuevo, te recomendamos hacer una limpieza profesional, al menos una vez al año. Esto no solo garantiza la adecuada limpieza de los paneles, sino que también podrás verificar que todas las partes del sistema se encuentran en buen estado.

¿Cómo dar mantenimiento a los paneles fotovoltaicos?

Inspección visual periódica

Realizar una inspección visual una vez cada seis meses, es esencial para tus paneles solares. Asegúrate de que no haya hojas, polvo, o suciedad en las placas, pues la presencia de estos agentes podría bloquear la luz del sol. Revisa también que no existan grietas o daños visibles en el vidrio. Si notas algún daño físico en el panel, es momento de contactar con un experto para su reparación.

Limpieza de los paneles solares

El mantenimiento de placas solares inicia, en sí, con una limpieza regular. Para ello, utiliza agua y un paño suave o una esponja no abrasiva. Evita a toda costa el uso de detergentes fuertes que puedan producir daños en la superficie de las placas. Y, si la instalación está en el techo, extrema precauciones o considera contratar a un profesional. No utilices tampoco herramientas de limpieza que podrían rayar o dañar el cristal.

Es muy importante evitar hacer la limpieza durante las horas de más calor. Limpia las placas solares en la mañana temprano o al atardecer. Las altas temperaturas pueden producir que el agua se evapore de forma rápida, dejando manchas. Básicamente, al limpiar durante las horas de menos calor, evitarás posibles daños y facilitas todo el proceso de limpieza.

Verifica el sistema de montaje y anclaje

Asegúrate de que las estructuras y anclajes que sostienen a los paneles están bien fijados. No pierdas de vista que, con el tiempo, los tornillos y soportes podrían aflojarse a causa del viento y las vibraciones. Por eso, es indispensable comprobar que todos los elementos estén firmes y en su sitio. Así evitas desplazamientos o caídas.

Control de sombreado

El sombreado es uno de los mayores factores que influyen en la pérdida de eficiencia de los sistemas solares. A medida que las estaciones cambian, el ángulo del sol puede hacer que nuevas sombras afecten la producción de energía. En este sentido, podar los árboles y plantas que rodean la instalación, de forma regular, puede ayudar a maximizar la exposición de los paneles a la luz solar.

Monitorea la eficiencia

El mantenimiento de placas solares también incluye hacer un seguimiento de la eficiencia de la instalación. En otras palabras, un sistema de monitoreo te ayudará a detectar si los paneles están funcionando o no a su máxima capacidad. La gran mayoría de los sistemas de energía solar cuentan con un monitor, que es el encargado de medir la producción de energía. Si percibes una caída significativa en el rendimiento, es muy probable que algo esté afectando la eficiencia de los paneles.

Revisa los cables y conexiones

Verifica que no haya cables expuestos o conexiones flojas. Ten en cuenta que las inclemencias del tiempo, las aves y otros animales podrían dañar el cableado. Una conexión defectuosa reduce la eficiencia del sistema e, incluso, puede representar un riesgo de incendio. Si notas un daño o desgaste en los cables, consulta a un profesional para su inmediata reparación.

Mantenimiento de placas solares: ¿Cuándo contactar a un experto?

Gran parte de las labores de mantenimiento periódico de placas solares pueden ser llevadas a cabo sin la ayuda de un profesional, eso sí, depende de dónde se encuentre la instalación. Sin embargo, es muy recomendable contratar a un técnico certificado para que realice una revisión completa una vez al año. Esto permite detectar problemas internos como, por ejemplo, defectos en el inversor o la pérdida de eficiencia en algunos módulos; desperfectos que no son visibles en una inspección básica.